El año pasado, el gobierno de China prohibió el comercio y el minado de criptomonedas en una de las represiones más intensas del mundo. Pero este gobierno busca otros usos de la tecnología blockchain y los tokens no fungibles (NFT), siempre que la tecnología permanezca bajo su control.
Este mes, Blockchain Services Network (BSN), una empresa de blockchain respaldada por el estado chino, planea implementar una infraestructura que permitiría a las personas y empresas en China crear, vender y comprar NFT.
He Yifan, director ejecutivo de Red Date Technology, una empresa que brinda soporte técnico a BSN, anunció la noticia al South China Morning Post y explicó que los NFT “no tienen problemas legales en China” siempre y cuando no estén conectados a criptomonedas como Bitcoin que están prohibidas en China.
China también tiene bloqueadas a todas las plataformas públicas como Ethereum, que se utilizan para respaldar y rastrear el comercio de NFT.
En cambio, la red BSN utilizará cadenas de bloques adaptadas de Ethereum y otras nueve plataformas que cumplen con su reglamentación. Entre esos requisitos está garantizar que todos los usuarios verifiquen sus identidades y permitir que el estado intervenga en caso de que se produzcan “actividades ilegales”.
La red BSN permitirá que los usuarios compren NFT solo usando yuanes chinos en lugar de las criptomonedas comúnmente utilizadas en el mercado fuera de China. Hasta ahora, la industria de NFT en China parece operar en una zona gris legal.
En junio, Alibaba, el gigante chino del comercio electrónico, lanzó una colección de 16 mil obras de arte NFT que se agotaron en minutos a través de su aplicación de pagos móviles Alipay. Durante estas transacciones, la empresa siempre fue enfática en establecer la distinción entre NFT y criptomonedas.
En los meses siguientes, Alibaba –junto con otros gigantes tecnológicos como la empresa de redes sociales Tencent, el sitio de transmisión de video Bilibili y la empresa de comercio electrónico JD.com– rebautizaron las ofertas de NFT como “coleccionables digitales”, una medida que los expertos interpretaron como un esfuerzo por evitar el escrutinio regulatorio.
En diciembre, el gobierno de China mostró signos de entusiasmo por los NFT, y el servicio de noticias estatal Xinhua lanzó su propia colección de NFT.
Aún así, las compañías tecnológicas más grandes de China no han podido capitalizar el creciente interés de NFT. En China, las empresas tienen prohibido obtener ganancias de las ventas de NFT, y los usuarios que los compran actualmente no pueden revenderlos.
Según He, BSN resolverá al menos uno de los principales problemas con los NFT chinos: actualmente están alojados por empresas privadas que no interactúan entre sí. BSN, dice, operará en múltiples cadenas en China para formar el mercado NFT más grande del país. “Los NFT en China tendrán una producción anual de miles de millones en el futuro”, puntualiza.
Fuente: Fortune
